≈ LA CATEDRAL ≈

Capilla Mayor

La Capilla Mayor está cerrada por una reja rematada por una crestería plateresca con una cruz realizada en 1515 por Juan Francés, maestro mayor de la catedral de Toledo. En la reja se hallan dos púlpitos, desde donde se cantaba la Epístola y el Evangelio. La capilla cuenta con un magnífico retablo cuyo programa iconográfico es principalmente mariano dedicado a la Asunción de María a los Cielos, titular del templo, y realizado por Juan de Juni y Juan Picardo a mediados del siglo XVI.

En la calle central encontramos un magnífico tabernáculo de planta circular con cúpula. Está flanqueado por dos pequeñas imágenes de Santa Catalina Mártir y Santa Margarita. Sobre el tabernáculo hay una hornacina cerrada con arco de medio punto en la que se encuentra representada la Dormición de María (Tránsito de Nuestra Señora), obra de Picardo. En los intercolumnios, flanqueando la escena se presentan dos apóstoles. Sobre el acro de medio punto se alza la Asunción de la Virgen a los Cielos, de Juni. Flanquea el conjunto dos imágenes situadas en los intercolumnios San Pedro de Osma, a la izquierda y Santo Domingo de Guzmán, a la derecha.

En la calle de la izquierda, en el primer cuerpo, se presenta la escena del abrazo de San Joaquín y Santa Ana en la puerta dorada de Jerusalén. Bajo esta escena, una imagen recostada de Jesé y bajo sus pues una pequeña figura de David con la cabeza de Goliat. En el tablero del segundo piso hay una representación de la Natividad de María y en el del tercero, la Presentación de la Virgen en el templo.

En la calle de la derecha, en el primer piso, el tablero muestra la Anunciación (el arcángel Gabriel comienza a arrodillarse porque ya se ha producido la Encarnación del Verbo Divino). Bajo este panel, una imagen recostada de Abraham, con su hijo Isaac que lleva un hatillo de leña para el sacrificio. El panel del segundo cuerpo representa la Visitación de la Virgen a su prima Santa Isabel. En el panel del tercer piso vemos la Circuncisión de Cristo.

Por último, el ático. En su centro se recrea la Coronación de la Virgen. La Virgen está arrodillada mientras recibe la corona de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo). Está flanqueada por dos medallones, en los que se representan la construcción la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, a la izquierda y la imposición de la casulla a San Ildefonso, a la derecha. Sobre los óvalos hallamos la heráldica del obispo Álvarez de Acosta donante del retablo.